Amigos, Crianza

NO LES PREGUNTEMOS NADA…

 

No les preguntemos nada, porque al fin y al cabo no sabemos si quieren tener hijos. Quizás lleven años buscando desesperadamente, calculando como locos los días de ovulación y nosotros ahí siendo indiscretos y pesados. O quizás sean de esas parejas que no solo odian a los niños, sino que además cualquier contacto con uno de ellos les provoca efectos secundarios incurables, o quizás estén dudando en tener críos o en no tenerlos y lleven un montón de tiempo pensándolo…y nosotros allí preguntando y preguntando. O quizás no quieren tener críos y punto, y no pasa nada.

No les preguntemos nada, porqué quien somos nosotros para preguntar algo tan personal e importante? Algo que realmente cambiará sus vidas para siempre.

No les preguntemos nada, tampoco  les hablemos de lo bonito que es tener niños, o mejor dicho, hagámoslo pero sin barrer para casa, hagámoslo con el corazón, sin pretender convencer de nada a nadie. Digámosles todas las cosas buenas, pero también los dolores de cabeza, las rabietas, las maniobras para llegar a fin de mes y el constante esfuerzo para que todo vaya bien…

No les preguntemos nada, ni mucho menos les hablemos del jodido arroz! Que si se pasa y esas idioteces! Hablemos del arroz a la cubana por ejemplo, o el arroz “tres delicias” de los «chinos» o de la magnífica serie  de animación «Arroz pasado».

No les preguntemos nada, porque no es justo y punto. Porqué a nosotros nos hace una ilusión tremenda que esos amigos, hermanos, primos, cuñados, conocidos, o que se yo…sean papás, y poder compartir con ellos un montón de cosas, y dejar de sentirnos tan «bichos raros», pero seamos sinceros, no está bien hacer la pregunta.

No les preguntemos nada, o mejor dicho, preguntémosles por la vida, por como hacen esas comidas tan ricas, por el «Tata” Martino y sus 100 días en el Barça, para cuando organizamos la próxima salida a Sitges, o por si prefieren las patatas del «Burguer king» o Mcdonald’s, y de paso les podemos hablar de otras cosas que no sean niños, que está genial, porque como monotema  pues oiga…puede agobiar.

No les preguntemos nada, porque el día que vengan y nos digan que van a ser padres, vamos a ser muy felices, los más felices del mundo mundial, o el día que vengan y nos digan que no tendrán niños nunca, pues también seremos muy felices, por qué  será lo que ellos querrán. Y si por cualquier cosa, vienen un día y dicen que llevan mucho tiempo intentándolo y no hay manera, pues seremos los primeros en ayudar…

Yo lo he preguntado varias veces (demasiadas) sin pensar la pregunta, llevado  por la ilusión de compartir esto tan maravilloso que es ser padre, sin embargo…prometo no preguntar más, prometo no preguntar nunca más, ok?

Así que lo dicho…no les preguntemos nada.

2013-10-06 17.30.16

10 comentarios en “NO LES PREGUNTEMOS NADA…”

  1. Que verdad más verdadera ^^ lo mejor es no preguntar nada, porque un día respondes bien, pero otro día no estás de buena y tiras como balde de agua fría la respuesta, y puede entonces que no te caiga muy bien, pero a ti toda la culpa, por no parar de preguntar jajaja 😀

  2. Aixx, la verdad es que muchas veces estamos cansados de tantas preguntas indiscretas. Y a mi me dan ganas de decirles que me dejen un poquito en paz, porque estoy harta. Cuando me quede, ya se enterará toda la faz de la tierra, pero hasta entonces. No preguntes siempre que me veas. Tienes tanta razón con este post. Porque te preguntan sin saber lo desesperada que puedes estar o te preguntan sin saber lo que piensas sobre los críos y ya dan por hecho que lo tienes que tener ya, porque si no, no podrás tenerlos. Y tienes que oír una y otra vez algunas tonterías que te sacan de tus casillas, pero eso sí, no les digas nada, porque encima les ofendes.
    Tengo amigas que lo están buscando y no me paso el día preguntándoles si ya se han quedado. Y por otro lado tengo alguna que otra amiga que no piensa ser madre, porque no quiere, y esa es su manera de pensar y hay que respetarla, igual que te respetan la tuya.
    Hay gente que por el simple hecho de ser padres e ir a por el segundo y el tercero, se creen con derecho a decirte lo que debes hacer y sobre todo, se creen con el derecho de preguntarte siempre. Lo tengo en mi familia y a más de uno le he dicho donde se puede meter las preguntas.
    PapáVader, a veces no pensamos en que con esa simple pregunta, movemos historias que es mejor dejarlas como están de momento. Porque esa persona, el día que quiera te lo contará todo y seguro que te preguntará por tu experiencia.
    Como siempre un post genial!
    BESOTES (y perdona por la parrafada :P)

  3. Gracias, Carlos (mira, tu nombre «serio» y todo), gracias de verdad. Porque yo soy una de esas pesadas, y leyéndote he hecho examen de conciencia y he suspendido garrafalmente… Toda la razón para ti, y gracias de nuevo por abrir esto, tan delicado y tan sutil, que es respetar el espacio y el tiempo de los otros.
    ¡Ole el Papá Vader! :))

  4. ¡Qué buen post! Si es que somos muy de meternos en camisa de once varas y querer saberlo todo sin conocer las consecuencias de nuestras preguntas. Yo generalmente, si tengo interés pregunto una vez por el tema a una pareja y con la respuesta que me den me quedo contenta y ya puedo dejar pasar el tiempo hasta el infinito, que no vuelvo a insistir. Tampoco creo que deba ser un tema tabús, pero es cierto que la gente se puede poner muy pesadita con el tema de los embarazos.

  5. Tienes tanta razón… Es sin mala intención, pero es verdad que muchas veces no pensamos en lo que puede haber detrás y se puede hacer daño a la gente. Me quedo con la felicidad que vendrá cuando nos lo digan y ánimo desde aquí a todos los que tienen problemas para concebir. Gracias por tu post.

  6. Sabias palabras. En mi caso personal acabamos cansados oir la misma pregunta una y otra vez. Hasta el punto de acabar contestando que no queríamos tener hijos. Después de tener a Haizea llega el segundo fascículo, y el segundo para cuando? Ni que fuese una enciclopedia.
    Un saludo.

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